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Aunque los médicos no le dan esperanzas, la mamá de Luz cree en otro milagro
Pidió que recen por su hija. “Yo hace dos meses la iba a enterrar, así que para mí no hay imposibles”, dijo Analía, en el Hospital Italiano.

Viernes, 1 de junio de 2012
La mamá de la beba prematura que fue dada por muerta al nacer, pidió a la sociedad “que se unan en oración todas las iglesias de cualquier religión, que hagan una promesa si quieren que Luz Milagros salga bien de esto, con una buena calidad de vida”, porque, dijo, “de nada serviría tenerla en una silla de ruedas”. En la puerta del Hospital Italiano, donde la beba está internada, Analía Bouguet mostró su optimismo y agregó que “Dios hace milagros, pero no se les da difusión”.
Luz Milagros llegó el martes al centro de salud porteño proveniente del Hospital Perrando de Resistencia, Chaco. Allí, el 3 de abril pasado, los médicos la habían dado por muerta al nacer y los padres la rescataron de la morgue 12 horas después casi por casualidad, ya que habían ido para despedirse por última vez de ella.
Bouguet se encargó de explicar que su hija no tiene muerte cerebral. Su salud sigue estable, aunque tiene un daño cerebral que los médicos califican de irreversible. Tal como se supo ayer, la madre destacó que Luz “recibirá sólo un tratamiento paliativo y no le harán más estudios ni le darán más drogas que no le hacen ningún efecto y sólo le provocan dolor”.
Consultada sobre las expectativas que le transmiten los médicos, Analía respondió que “ninguna”, y aseguró: “Pero para mí no hay imposibles, yo hace dos meses ya la iba a enterrar y ahora espero otro milagro, los imposibles no existen.”
“Ella se puede mantener con vida –dijo–, su corazoncito funciona bien, está con el respirador tan bajo que se lo podemos sacar en cualquier momento.” A minutos de haber recibido el último parte médico, la madre de Luz agregó: “Hay que ver qué pasa con el estómago, hay momentos en que funciona mejor, así que el tratamiento incluye alimentación”. Como parte de su expresión de fe, Analía dijo: “El que dispone de los tiempos es Dios, no tenemos un pronóstico, no sabemos cuánto vamos a estar acá, yo le hablo y me abre los ojos, la acaricio y mueve la cabeza, y hay una parte del cuerpo que parece que tiene cosquillas.”
Fuente: Tiempo argentino