En plena Güemes
Por tercera vez roban en un estudio jurídico contable
La inseguridad no da tregua ni los fines de semana y esta vez un estudio jurídico contable fue blanco del accionar de unos delincuentes, quienes se llevaron computadoras con información de importancia para las damnificadas y 5000 pesos que mañana iban a ser usados para el pago de alquiler y servicios.

Domingo, 13 de noviembre de 2011
Este hecho en plena calle Güemes al 600, zona de alta circulación de personas y vehículos debido a los conocidos comercios ubicados en las inmediaciones.
En el estudio trabajan Patricia y Yanina Fernández, abogada y escribana, respectivamente, las que ya pasaron por este tipo de situaciones tres veces. “Los robos anteriores no fueron esclarecidos, y sólo con esfuerzo diario podemos seguir adelante, pero estamos cansadas”, relató la abogada sobre el suceso ocurrido ayer, aunque no hay precisiones sobre el horario.
La puerta de madera de ingreso al estudio fue violentada en la parte de la cerradura, y muy tranquilos él o los delincuentes se llevaron tres computadoras y cinco mil pesos.
“El dinero estaba guardado en el cajón de mi escritorio, vinieron a buscar la plata, como si supieran “, agregó la profesional, que tiene a su hermana escribana como socia, y otra hace de secretaria.
La situación es que la escribana, se presentó en Güemes 616, después de las 18.40 para buscar algo del estudio y “me encontré con toda la policía adentro y no entendía nada, pero sabemos que el kiosquero de al lado, llamó a la policía porque vio abierta la puerta”, comentó Yanina a NORTE.
Las oficinas , estaban desordenadas, papeles esparcidos sobre el escritorio de Patricia y otros en el suelo, donde las huellas estaban secas, “por lo que entraron cuando no llovía y eso fue antes de la cinco de la mañana”, especuló la abogada y que si bien en la cuadra cuentan con un sereno, el mismo que estaba en los otros dos robos, cree que “hay alguien que pasa el dato” y lamentó que se hallan llevados los equipos informáticos, “porque tenemos información de gran importancia y si tenemos que pagar para recuperarlos, lo hacemos”, le dijo muy enojada al hombre de seguridad , que fue buscado por otro vecino para que informe en qué estado dejó su servicio.
“Esto no pudo haber ocurrido en la madrugada, cuando me fui, estaba la puerta cerrada y esta mañana (ayer), cuando pasé estaba igual”, fue la versión del sereno, un exintegrante de una fuerza de seguridad federal.
Las damnificadas, dudaron que el hecho logre esclarecerse, por los malos resultados en las anteriores investigaciones. Durante la entrevista, se hallaba personal de la comisaría Octava, las tres hermanas, un comerciante y el sereno, cuyo servicio es cubierto económicamente para los vecinos de esa cuadra.
Fuente: Diario Norte