Curioso, llamativo y algo disparatado fue lo que sucedió en Belgrado, luego del 3 a 1 del Ludogorec al Partizan, equipo que tras esta derrota quedó eliminado de la pre Champions League.

Consumada dicha eliminación, los jugadores del equipo local, como muestra de agradecimiento, se acercaron a saludar a sus hinchas y a entregarles su remeras. Hasta ahí, una escena típica de cualquier rincón del mundo.

Pero lo particular sucedió después, cuando Miloš Radisavljevic Kimi, un reconocido hincha del Partizan, ingresó al campo sin dificultades y, caminó lentamente hacia Stefan Scepovic, el capitán del equipo. Sin medias palabras, el hincha le sacó la cinta de capitán, algo a lo que el jugador no se resistió.

Envuelto en una ovación, Radisavljevic Kimi volvió a la tribuna con su "trofeo" y todo siguió como si nada hubiese pasado.



Fuente: Minutouno