Espectáculos El pesaje: el increíble show en la previa de la pelea del año 
El campeón de los Pesados de la UFC, Caín Velásquez, y su rival de este sábado, Junior Dos Santos, se cruzaron por última vez antes de subirse al octógono frente a la balanza, en un pesaje con todos los condimientos. minutouno.com estuvo ahí y te cuenta los detalles.
La habitual tranquilidad de un viernes por la tarde en la ciudad de Houston se vio alterada por una marea de fanáticos de la UFC, que se acercaron al imponente Toyota Center para presenciar el pesaje del tan ansiado combate entre el campeón Caín Velásquez y el brasileño Junior Dos Santos.
Cerca de tres mil personas se dieron cita en el estadio donde habitualmente juegan los Houston Rockets, equipo de la NBA, y fueron testigos de un show de primera clase. Muchas banderas mexicanas, remeras con la cara de Velásquez (el gran favorito del público) y también varias apoyando al brasilero, que pese a estar claramente abajo en la preferencia del público local, tiene varios seguidores que se hicieron sentir.
Si bien el pesaje estaba pautado para las 16, dos horas antes comenzó la jornada, con un jugoso ida y vuelta entre el peleador local, Chad Mendes, y los fanáticos, que poco a poco iban colmando las tribunas.
Tras la charla con Mendes llegó el turno de esperar, acomodarse y ponerse a punto para el plato fuerte: los pesajes. Exactamente a las cuatro, sin ningún tipo de impuntualidad, comenzaron a subirse los luchadores que pelearán en la extensa jornada del sábado (serán 13 contiendas en total).
Algunos con perfil bajo, otros apelando a todo su histrionismo (como el caso de John Dodson, que antes de subirse a la balanza bromeó con una promotora y hasta se sacó una foto con ella), uno a uno fueron desfilando los protagonistas, que se convirtieron en la entrada ideal para el plato fuerte de la tarde.
En la inconfundible voz de Joe Rogan, histórico presentador de la UFC, sonó el nombre de Junior Dos Santos, y el estadio se unió en un gran abucheo mientras "Cigano" hacía su entrada. Sin embargo, lentamente aparecieron también sus fanáticos, que fueron tapando a la inmensa mayoría mexicana presente en el show.
Más serio que de costumbre, con mirada desafiante y sabiéndose bien visitante, el brasileño se desvistió y se subió a la balanza, que marcó 240 libras (108 kilos).
Inmediatamente, las luces volvieron a apagarse y apareció él. Con perfil más bajo que su rival, pero acompañado de una enorme ovación, Caín Velásquez se subió al escenario e hizo estallar a las miles de personas presentes, antes de acusar 241 libras (109 kilos) en la báscula.
Luego llegó el tiempo de ponerse cara a cara por última vez. Ambos con el ceño fruncido, respetuosos pero desafiantes, Velásquez y Dos Santos posaron frente a frente para las cámaras y ante la atenta mirada de Dana White, presidente de la UFC, que el día anterior se había mostrado increíblemente orgulloso por la enorme repercusión que esta pelea atrajo en todo el mundo.
Y así fue como los dos mejores peleadores de Peso Pesado de la actualidad se despidieron del público antes de la gran cita. La próxima vez que se crucen será arriba del octógono, y allí no habrán palabras ni excusas que valgan. El sábado por la noche se verá la verdad, y más de veinte mil personas en el estadio y millones en todo el mundo serán testigos de eso. La cuenta regresiva ya empezó.
Fuente: Minutouno.
Sábado, 19 de octubre de 2013
|
